Entre los animales míticos y seres zoomorfos, Daniela Maimone menciona historias sobre el nacimiento de niños prodigiosos que deben separarse de los padres pues no pertenecen al mundo de estos últimos; cada uno de esos niños nace con un huesito de pollo el cual emite un sonido que los ayuda a transformarse, nos dice Daniela:
“La virtud [del niño] es un huesito de pollo que tienen en su manita empuñada, que pueden soplar como si fuera una flauta, estos niños son muy poderosos y crecen muy rápido, tienen la facultad de noche de transformarse en tigres que pueden volar. Por esto los padres los vigilan mucho y lo ponen a dormir en cuarto especial apartados de sus hermanitos, porque han ocurrido casos que de noche y con mucha hambre se han comido algún hermano pequeño.
Desde que nace lo empiezan a vigilar y no lo dejan salir ni que se le acerque alguien, en particular temen que algún brujo puede quitarle su virtud, o sea, quitarle su huesito para hacerse más poderoso. Si esto ocurre el niño enflaquece, se enferma y muere. Para protegerlo lo vigilan también sus compañeros, los sutz'balum [hombres jaguares con alas de murciélagos]… el niño crece rápido, aprende a soplar su huesito transformándose en tigre de noche, cuando es de buen tamaño se va volando de noche con sus compañeros, dicen que a sus padres le[s] traen dinero, y muchas cosas, ropa, zapatos, no les falta nada…”
Daniela Maimone Moroni, \Relatos y leyendas chontales de Tabasco\, Daniela Maimone Moroni (recopiladora), México, Grupo profesionales Gráficos de México, 2010, Pág. 256.
Nacho López. "Irma Hernández Pérez" en Testimonio. Los chontales de tabasco. Emipres. México. 1982.
Universos Sonoros Mayas. Un estudio diacrónico de la acústica, el uso,
función y significado de sus instrumentos musicales
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